Existen tres tipos de contadores: los analógicos, los digitales y los digitales inteligentes. La persona que tenga, por ejemplo, un contador digital, podrá consultar todo lo que desee, como por ejemplo la potencia máxima utilizada, cómo ajustarla y descubrir cómo ahorrar lo máximo posible. Hoy en día, la mayoría de los contadores que se utilizan en los hogares son digitales y por lo tanto, profundizaremos en ellos nuestra explicación.

Existen varios modelos, dependiendo siempre de sus funciones, pero la verdad es que ofrecen muchos más datos que un contador analógico convencional. Así pues, los contadores pueden ayudar a obtener nueva información, puesto que pueden abrir un abanico de oportunidades de mejora de cara a la facturación.

Por esa razón, a continuación te mostraremos unos cuántos pasos para que puedas llegar a entender a tu contador digital a la perfección:

1.      En primer lugar, si deseas obtener la lectura del consumo que hemos realizado durante el mes, se deberá pulsar el botón que se encuentra en la parte delantera del contador. 

2.      Una vez pulsado el botón se deberá buscar el código 1.18.1. que equivale a la lectura eléctrica global en kW.

3.      Y finalmente, cuando hayas localizado el código, te darás cuenta de un número justo al lado de del código anterior. Ese número será el que corresponderá a su consumo en kW. 

Leer un contador digital es de lo más sencillo. En el caso de tener instalado un contador analógico, su lectura será también fácil pero con el inconveniente de obtener mayor margen de error en cuanto al número exacto de consumo en kW. Los contadores analógicos tienen forma de reloj y en su interior podrás encontrar relojes de una medida más pequeña que sirven para representar los dígitos de lectura. Dichos dígitos se deben leer de izquierda a derecha y contar cuántas son las veces que pasa la marca del reloj, en una unidad de tiempo determinada.

Estos son unos sencillos pasos para entender un contador, pero, actualmente puedes obtener toda la información de un contador a partir de distintas vías: a través del teléfono (llamando a la compañía distribuidora correspondiente), por internet (introduciendo los datos de consumo que indica el contador) y por formulario (descargando, rellenando y enviándolo a tu compañía).

Esperamos que te haya servido de ayuda este artículo y que a partir de ahora puedas entender de una mejor manera el funcionamiento de tu contador.